Ayer jueves, las clases de primero y segundo tuvimos la gran suerte de ver el bosque en otoño en Ribavellosa.
Siempre está precioso y aprendemos un montón de cosas y en esta ocasión no podía ser de otra manera.
Después de unas cuantas curvas (y unos pocos mareos)... llegamos a nuestro destino. Allí estaban esperándonos Miguel, David y la perrita Tanis para acompañarnos durante la jornada.
Las chicas y chicos de primero, se convirtieron en auténticos detectives y se enfrentaron al misterio del arrendajo. Siguiendo las pistas y resolviendo los misterios que encontraban por el sendero... tenían que averiguar quién se había comido al pajarito. ¿Creéis que lo consiguieron? ¡por supuesto que sí! (sin dar la solución, únicamente apuntaré que es un ave nocturna con los ojos muuuuy grandes y un cuello capaz de girar muuuuucho).
Por otro lado, los aventureros de segundo se dispusieron a disfrutar de un paseo por el bosque. Mientras observaban los bonitos colores que la naturaleza nos presentaba, y aprendían muchas cosas sobre plantas y animales, disfrutaron de una auténtica "bosquetogymkahana". Tuvieron que superar una prueba de olfato, otra de oído en la que tenían que averiguar a qué animal pertenecía cada sonido, jugaron un pañuelo un tanto particular en el que aprendíamos características de los animales,... ¡Incluso hubo oportunidad de repasar la lección de cono en pleno bosque!
Después de "tantos" kilómetros, fuimos a reponer fuerzas todos juntos y después de comer... ¡a jugar en el parque!. Desde aquí queremos aprovechar para dar las gracias a David y Miguel por enseñarnos tanto y a Tanis por acompañarnos en nuestras aventuras con tanta paciencia y calma.




















