Seguimos poniendo algún punto para intentar que nuestros hijos cojan el gusto por la lectura.
Terminamos la semana anterior en el punto 8.
Así que nos toca el siguiente.
9.- Comentar ciertos libros con fechas determinadas, como pueden ser el Día de la Paz, las Fiestas de la localidad, Distintas Culturas, Medio ambiente, Pobreza en el mundo...
10.- Favorecer aquellas lecturas que están en relación con los intereses de los niños/niñas. Hoy existe una gran variedad de libros con temáticas que van desde lo deportivo, intelectual, historia o ciencia ficción. Para ello es necesario conocer la oferta del mercado. Lo mejor es acudir a librerías, bibliotecas o si conocemos algún profesional..
Por ejemplo , si sus temas preferidos son los animales hay que favorecer este tipo de lecturas o si tiene mucha imaginación libros de fantasía.
11.- La psicoliteratura te puede ayudar a resolver aquel problema específico que tienen los hijos. Hay libros para todas las edades en relación con los celos, la envidia, los hijos únicos, la hospitalización y enfermedad, las mentiras, los niños adoptados, la obesidad, la sobreprotección a los hijos, la separación de los padres y el divorcio, los miedos, los robos o las drogas.
Estos libros nunca son farmacéuticos, pero sí son terapéuticos.
12.- Con todos los libros que vaya leyendo se puede hacer el "cromolibro".
Es decir, utilizando una agenda de anillas va colocando junto a la fotografía de la portada del libro el nombre del autor, el ilustrador, la editorial y el año de publicación.
Por la parte de atrás de esa misma página hará un pequeño resumen del libro con las ideas que le han parecido más sugerentes, los personajes con los que se ha sentido identificado y la opinión personal del libro. Esta idea le gustará mucho a medida que se vaya haciendo mayor, ya que verá lo que opinaba de los libros cuando era pequeño.
13.- Compartir las mismas lecturas que hacen nuestros hijos durante la enseñanza secundaria ayuda a conversar sobre los mismos temas y así conocerlos mejor. La lectura recomendada es una buena forma de favorecer el diálogo y el acercamiento entre padres e hijos. Habla con tus hijos de la posibilidad de intercambiar y recomendarse libros interesantes entre sus amigos.
14.- Cuando los hijos crecen y se hacen mayores podemos seguir hablando de libros si lo hemos promovido durante su infancia y adolescencia.
15.- Si a pesar de todos los esfuerzos no consigues hacer a tus hijos lectores, no desesperes. Hay niños que tardan más que otros en acercarse a los libros.
Esperando que haya podido servir a por lo menos una familia. Un saludo. David.
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